En el Quijote, hay una parte muy importante que es la quema de libros. En clase nos propusieron hacer nuestra propia quema de libros.
Sinceramente no quemaría ningún libro, hay muchos que no me han gustado, pero no tengo porque quemarlos. Quizás no los he leído en el tiempo adecuado, ni de la manera adecuada.
En cambio, programas de televisión si que quemaría alguno. Programas inmorales, que no educan a la sociedad. Malos programas que no tendrían que estar permitidos. Pero, en cambio, siempre hay alguien que los ve.